Último onomástico: El lunes 15 de octubre de 1888, día de Santa Teresa de Ávila, la que aprendió que el Señor la quiso para Sí, “alta vida esperó, el corazón le dio”, mujer decidida y emprendedora, espiritualidad de entrega incondicional… por ella y por María Teresa gran fiesta de despedida en Neuwerk, por ser le última celebración onomástica allí: Las congratulaciones la embargan, pues prevé su éxodo definitivo, después de haber hecho tanto por tantos. Los niños la felicitan y sus complacencias se rastrean en su Diario (D72). A Roma llevaría ella los recuerdos de insignias y detalles de aquella Liga Angélica. El miércoles 17 el párroco habla de una asociación bienhechora para el Instituto. El jueves 18 se observa mucho espacio libre y las dos van quedando “muy reducidas: “Ciertamente, el Señor dará su bendición” (Ae57).