Santísimo en la Capilla: El 9 de junio de 1892 solicita al Fundador la Madre María el tener al Santísimo en la capilla, le pide un Sello para la II Orden y cuenta sobre la misión en India, acerca de novicias… El 7 de junio le notifica la muerte repentina de la novicia “suave y alegre”, Francisca (Sabina) Wagner, con 27 años de edad. Deceso ocurrido a las 2:30 a.m. Había exclamado a media noche que se moriría de 2 a 3. El 18 de junio le remite informe sobre deceso y entierro, le recuerda que le espera para la profesión de las cuatro restantes novicias, cuyos informes incluye y añade que “las Hermanas han estado estrechas, recelosas y muy miedosas”.
Otro deceso: El 26 de julio de 1892 ocurre el deceso de otra Hermana, precisamente de las primeras en la fundación de 1888: Clara de la Inmaculada Concepción Rheinwald con muerte sorpresiva del corazón a los 37 años de edad, presente Jordan, cohermanos y cohermanas, asistida por el párroco franciscano. El ayuntamiento envía el 30 de julio una inspección cuyos resultados son satisfactorios. La Madre María anhela ir a Roma para estar más cerca del Fundador, ya tan acostumbrada a su forma de gobernar.