Cuerpos para tocar
Esta técnica fue descubierta en 1978 por el doctor Günther von Hagens en la Universidad de Heilderberg, Alemania; se dio cuenta de que especímenes anatómicos podían preservarse con plásticos.
Desarrolló la llamada "plastinación". Con ella conserva los tejidos reemplazando el agua y los lípidos por polímeros. Estos son miles de moléculas pequeñas que, unidas, conforman cadenas de diversos materiales, como resina o silicona.
Von Hagen, ha montado una exhibición itinerante. Su obra "Mundos Corporales" muestra más de 200 partes del cuerpo plastificadas.
Con un gran éxito internacional, los visitantes observan desde el cuerpo de un hombre que juega ajedrez, al de otro sobre un caballo.
Sin hacer caso de las críticas de la iglesia católica, este médico alemán ha aclarado que ni él sabe en qué punto traspasa de la ciencia al arte, rompiendo mitos como el de la muerte y de los cadáveres.
El material que utiliza proviene de personas que han donado sus cuerpos a la ciencia, siempre respetando la dignidad desde todos los ángulos, según ha dicho Von Hagen.
Para el doctor Humberto Güiraldes, encargado del Laboratorio de Plastinación de la Universidad del Desarrollo, abierto públicamente esta semana, la técnica es un gran aporte para la docencia. Parte de los beneficios de este proceso es el poder trabajar con trozos del cuerpo plastinados, sin olor, secos, con textura y durables.
"Es positivo que las universidades tengan este tipo de aporte para la enseñanza. Los estudiantes van a tener un apoyo para aprender anatomía, que ahora no tienen. El hecho de que una pieza se pueda tocar y llevar para una sala que no sea el pabellón de anatomía, es fantástico", destaca.
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Diario: El Mercurio- Chile- 5/12/02
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